El yacimiento arqueológico del Monastil (Bien de Interés Cultural) es uno de los tesoros del patrimonio histórico de Elda y de la provincia de Alicante. Se sitúa en las estribaciones orientales de la Sierra de La Torreta, a las afueras de la ciudad, rodeado por un gran meandro del río Vinalopó.
Este asentamiento estuvo ocupado entre finales del tercer milenio Antes de Cristo (Calcolítico) y el principio de la Edad Media. Tuvo un especial desarrollo desde la época ibérica hasta el final de la Antigüedad.
Los trabajos arqueológicos realizados desde hace décadas han hecho posible recuperar importantes vestigios ibéricos y romanos (el poblado y su muralla, el almacén y la alfarería), así como los restos de una iglesia cristiana de los períodos bizantinos y visigodos.
El Monastil fue un lugar estratégico clave para controlar el principal paso natural del río Vinalopó en el Valle de Elda, camino entre la costa mediterránea y la Meseta, lugar de transito de comerciantes, viajeros, artesanos, ejércitos y en definitiva de ideas, culturas y tradiciones diversas desde la Prehistoria hasta los inicios del Islam.
La escasez de agua para el riego era un grave problema para nuestros antepasados, cuyo recurso principal era la agricultura. Para resolver este problema tanto en Elda como en Petrer se trató de aprovechar las aguas del río y de las ramblas con la construcción de embalses y obras hidráulicas. El Pantano es un humedal, un ecosistema híbrido entre el acuático y el terrestre, que se inunda de manera importante o intermitente. Es un lugar rico en vegetación, con una de las mejores comunidades de tarays de toda España.
Las presas del embalse de Elda, actualmente fuera de uso, forman parte de una importante obra hidráulica de contención y almacenamiento de aguas para el riego construida en el cauce del Vinalopó. La primera presa, peor conservada, se finalizó en 1698. La segunda presa, más pequeña, se construyó entre 1842 y 1890.
Bosque de tarays. Se trata de un arbusto de 6 a 8 metros de altura, de aspecto plumoso, con ramas largas y flexibles. Tiene hojas muy pequeñas que se recubren unas a otras a modo de tejas. florece en primavera con flores blancas o rosa pálido. Su corteza y sus ramas se utilizan como astringente, cicatrizante y remedio anti-diarreico.
Calera. Se trata de un horno donde se calcina la piedra caliza para la obtención de cal. En la Sierra de La Torreta se encuentran dos caleras que se utilizaron, a mediados del S XIX, para la construcción del túnel de la línea de ferrocarril Madrid-Alicante.
La Torreta. Es una edificación defensiva mediaval. Su construcción entre finales del S XIV y principios del S XV.
Su objetivo respondía a la ubicación fronteriza entre los Reinos de Castilla y Valencia.
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